Hola Caminante Espiritual… ¿COMO TE SIENTES en este instante? ¿Triste, aburrido, igual que ayer, confundido, ansioso, agresivo, con miedo, contento, feliz, pleno de ideas, no lo sabes, imaginando y creando una nueva realidad?. La verdad es que ya son muchos días en una cuarentena que nadie comprende, que parece lógica y justificable, pero ¿realmente lo es? Despierta curiosidad como algo que no vemos lo rodeamos con la energía del miedo para que conquiste nuevos territorios y doblegue corazones. Hemos estado compartiendo el miedo.
Como algo tan minúsculo y casi imaginario logra que se propague tan rápido el temor. Aunque no lo notemos, la vida en nuestro hermoso planeta continúa creando nuevas formas y expresiones de sí misma… Todas inician con una célula o la unión de dos seguidas de un proceso de división celular hasta manifestarse de alguna manera y forma particular. La levadura de la vida aprovecha cada fragmento de ADN y juega con el repetidas veces para crear un nuevo ser. ¿Entonces cada vez que la madre tierra procree una nueva forma de vida nos inventaremos alguna variedad de cuarentena por miedo en vez de aprender a convivir? O inventaremos algún método que elimine al nuevo compañero de planeta por miedo…… la lista de miedos podría ser bien larga.
COVID al igual que otros de sus antecesores vino para quedarse y así no nos guste tendremos que aprender a convivir con él. El planeta tierra no es exclusivo de los seres humanos, también pertenece a otros seres. A COVID no lo vemos, pero sabemos que está presente esperando una oportunidad para ingresar a nuestro sistema. Algunos aceptaremos el reto y desarrollaremos las defensas necesarias, otros no tanto y con alguna frecuencia estarán bajo atención médica. Convivir con el COVID nos hará más fuertes de la misma manera como nos hemos fortalecido ante otros virus los cuales, hoy, manejamos de manera tranquila.
Si todo el covid existente en el mundo se pesara no alcanzaría el gramo de peso. Según los científicos un virus pesa aproximadamente 0,000000000000001 grs y si asumimos que a cada habitante actual del planeta le corresponde un virus en una relación 1:1 entonces y con aritmética sencilla la masa total del virus seria: 7.700´000.000 de personas * 0,000000000000001 grs = 0,0000077 grs… saquen sus propias conclusiones.
COVID con muchísimo menos de un gramo de peso y unos pocos meses de nacido ha puesto en tela de juicio y señala que las bases en que se fundamenta la economía, la política, la ciencia y la religión, estructuras que nos han servido por siglos, tal vez deban ser revisadas, ajustadas y o reemplazadas por completo simplemente para convertirnos en una sociedad más transparente y fuerte. Estas disciplinas han estado dando palos de ciego. Talvez ya cumplieron su ciclo y nos aferramos a ellas añorando sigan operando, así sea, con las ya consabidas fallas. ¿Realmente queremos seguir igual?
Al mismo tiempo COVID, creo un espacio de aislamiento para reencontrarnos y reconectarnos con nosotros mismos, espacio desde donde todos nos hemos estado cuestionando cosas mientras viajamos a nuestro interior y entre el desespero y la añoranza enfrentando temores que señalan directamente los temas por resolver en nosotros y que vemos reflejados en nuestra cotidianidad y colectividad.
Definitivamente La vida no es eso que pasa allá lejos de nosotros… La vida es eso que sentimos y palpita en nuestro interior. COVID nos está recordando lo valioso que es la vida y que lo que nos hace humanos es el amor fraternal y la unión que podemos desarrollar para enfrentar situaciones complejas. COVID nos lleva a redescubrir lo mejor en cada uno de nosotros y a unirnos como especie.
Caminante, hoy te invito a que en vez de compartir el miedo compartamos amor. No más mensajes buscando justificaciones, culpables o teorías que solo satisfacen al EGO. Te invito a que a partir de hoy todas nuestras comunicaciones sean en el nombre del amor, en el lenguaje del amor y con el aroma del amor porque desde allí podemos construir una humanidad más amable, compasiva, progresiva y hermosa.
Un abrazo
AG